

"Si al servicio te quieres poner, de nuevas herramientas has de disponer".
Protección, protección y protección. Para nosotras, un fondo de armario. Siempre puedes (y debes) utilizarlo y no importa a dónde vayas, porque siempre encaja.
Si ya es importante cuidarse y ampararse para practicar, cuando te pones al servicio, esa protección se vuelve indispensable.
herramientas de protección y servicio
Algunas técnicas o recursos que hemos ido viendo: enraizamiento y el huevo de luz (casilla 2). Plantas que nos ayudan a defendernos (casilla 19 y 25) y la combinación de éstas en inciensos y sahumerios (casilla 26). También herramientas específicas como el atrapaespíritus (casilla 21) y oye, no nos olvidemos, celebración y risa son, sin duda, también unas de las mejores protecciones (casilla 16). Y si bien es cierto que podríamos seguir con la lista, también lo es que estás haciendo magia, así que no olvides que puedes coger cualquier elemento y convertirlo en algo idóneo para tu protección.
Por otro lado… ¡Vamos al lío!
Si has caído en esta casilla es probable que el tablero te esté preguntando algunas cosillas:
¿Estás protegiéndote adecuadamente cuando te pones al servicio?
Si tienes herramientas específicas para ello, revísalas, ¿necesitan alimento? ¿Siguen queriendo estar al servicio, o su función ya ha acabado?
Si todavía no dispones de estas herramientas, es momento de crear, entre otras, tus cintas de protección: escoge dos trozos de tela, normalmente de color rojo. Córtalos con el largo suficiente como para rodearte con uno la cintura y con el otro, el cuello (así protegerás estos dos centros energéticos).
Conságralas en el Astral con alguno de tus Maestros (allí puede que te den algo más de información sobre lo que necesitan). Extra: puedes personalizarlas como sientas, no te reprimas y deja volar tu imaginación.
NoWarning! Recuerda que una herramienta protectora te aliviará mucho trabajo, ya que ella funciona por sí misma cumpliendo esa función, sin embargo es muy (muy) importante que no le cedas todo el poder. Es tu aliada, va mano a mano contigo. Si se te olvida, la pierdes, etc. no es el fin del mundo…

"Si algo estás buscando, Rastrea, ¡te está esperando!"
Aunque sabemos que San Cucufato funciona, también hay otros Maestros y técnicas para encontrar aquello que estás buscando. Y, así, dejamos al santo descansar un rato.
rastreo
Estos Maestros se dedican a ayudarte a encontrar lo que precises, tanto en el Astral como en el plano físico. Los vas a necesitar para recuperar fragmentos del Alma (casilla 39), a veces te acompañarán a visitar vidas pasadas (casilla 34) y también podrás pedirles ayuda para encontrar objetos.
La verdad, cada uno tiene su relación especial con su Maestro de Rastreo, así que remángate que llegó tu momento. Dale al play a este audio y márcate un viajecito. Conecta con tu propio Maestro de Rastreo y descubre cómo trabajar juntos. (Recuerda ofrendaaaarrrrr).
Por otro lado, una interpretación “más terrenal” (si es que eso existe en este juego), sería que el tablero te esté invitando a iniciar una búsqueda. ¿Sabes hacia dónde te diriges y qué necesitas? ¿Tienes tu objetivo claro? ¿Estás prestando atención a las señales que se te envían?
O, por otro lado, puede que te invite a profundizar en la búsqueda que ya iniciaste. ¿Sigues con tu propósito, o te has desviado? ¿Estás aprovechando la ayuda de tus aliados? ¿Sientes que estás buscando en el lugar correcto?
¡Ey! Espera, que también puede haber otra invitación, chequea: ¿están ya los resultados enfrente de ti y no te estás dando cuenta? ¿De qué técnicas te sirves para la búsqueda? ¿Son las correctas?